miércoles, 15 de abril de 2009

La copa C

En una sociedad machista como en la que vivimos las mujeres nos acostumbramos a ser vistas, estamos expuestas a las miradas lascivas de tipos que antes a detenerse a pensar en tu nombre ya se están imaginando todo contigo.

Los hombres te ven en la calle como si fueras de otro planeta, como si su madre o su hermana no tuvieran, como si de bebés no hubieran mamado para alimentarse y aun conscientes de esto te dicen ¨acábame de criar¨. Cuando dicen esto me dan ganas de realmente educarlos a cinturonazos.

Para soportar estos comportamientos primitivos se debe desarrollar cierta inmunidad, sales a la calle como quieres, provocando las miradas indiscretas y como consuelo y aún en contra de los pensamientos feministas, te aprovechas de lo que te ha dado la vida (si te dio algo, claro!). Como sea, se consiguen taxis gratis, filas más cortas, cuentas en ceros, mejores calificaciones y alguno que otro problema.

Cabe mencionar que no funcionan igual si no son utilizadas con inteligencia, no es lo mismo una tonta portándolas a la que lo máximo que le conseguirán será un helado gratis, mientras otras más avispadas que podemos ver en las noticias consiguieron ser primeras damas o lideresas importantes.

Es divertido ver todo lo que se puede hacer de un hombre cuando se vuelve susceptible ante los encantos de una mujer, porque tienen razón, no son las tetas, es la habilidad femenina. Es un juego en el que tienen todas las de perder, creen que nos conquistan y no es así, vamos un paso adelante y ni siquiera lo notan. Caen sin saber en que caen, no saben decir que no, no ponen resistencia, se convierten en materia maleable y si sabes manejarlos harán lo que quieras. ¡Y algunos aún se atreven a decir que son más inteligentes que nosotras!

Yo que las odiaba tanto cuando comenzaron a surgir en sexto de primaria, según yo fue prematuro y detestaba ya no poder brincar y correr con la misma libertad. Ahora agradezco a la genética que me haya dado un buen par.

Me parece una ventaja justa aunque limitada considerando el sinnúmero de desigualdades que existen entre ambos géneros y aunque vivamos en esta sociedad patriarcal y retrógrada hemos de recuperar terreno no con nuestras dotes físicas sino con inteligencia y voluntad. Finalmente el que un par de tetas jalen más que un par de carretas sigue siendo un concepto machista que cosifica a la mujer depauperando su dignidad y valor como individuo y que no debería ser vigente en pro de la equidad y la interrelación entre hombres y mujeres.

2 comentarios:

Borchácalas dijo...

Creo que más que denigrante -aunque no digo que no sea un dicho denigrante, puesto que pone a la mujer en función de sus atributos-, es una metáfora y burla a los hombres que se dejan llevar por la hormona y dejan cosas por ir con una mujer -vayan o no a tirarse.

"Vienes con nosotros a..."
"No, voy con Karlota Katalina de Fuego y Nicotina"
"Tssss... Ya nos cambiaste. Jalan más un par de tetas que un par de carretas. Tsss..."

Pero es un burdo ejemplo.

Y yo también apoyo aquello de que las mujeres van a conquistar el mundo con la inteligencia. Cuando lo hagan, ¿pueden educar a las que no tienen esa línea de pensamiento y que le dan poder a los misóginos?

Jajajaja, ya, bueno. Buen post cirticón. jajajaja

Saludos.

Anónimo dijo...

(suspiro) ahhh... Karla mi buena Karla siempre hablando de feminismo y tetas. Es verdad innegable el hecho de que vivimos en una sociedad machista, pero el "nos acostumbramos a ser vistas" me hace pensar que es una buena costumbre, ¿a las mujeres no les gusta ser vistas? si eso no es verdad entonces tampoco a los hombres nos gusta mirarlas. Una mujer es bella por naturaleza (bueno salvo excepciones) y por lo tanto es algo que apetece admirar. Las tetas (un buen par)es innevitable dejarlo pasar desapercibido, es como cuando las mijeres ven un buen culo masculino, tampoco se quedan inertes.
Yo creo que más que vivir en una sociedad machista tambien vivimos en una de lo físico, porque un hombre con un buen rostro puede tener mejores oportunidades socialmente que uno que no lo tiene, uno alto mas que uno bajo y asi hasta llegar al punto en el que a una mujer se le admire más por sus tetas o su físico que por su intelecto o sentimientos. Es común que una persona con "buen físico" provoque más miradas lascivas que aquel que no lo poseea.
También en mi opinión interviene el factor "instinto" en el cual los seres humanos nos fijamos en las cualidades de nuestro sexo opuesto por razones de su capacidad para procrear la especie y otorgar las mejores condiciones para nuestros hijos, asi en el reino animal, el que trinufa será el macho que demuestre mejor sus atributos.
Finalmente cabe señalar que sería mejor que las mujeres no estuvieran expuestas a palabrerias que rozan el punto de lo absurdo y lo grotezco en la calle. ¿Por que no mejor decirles que bella estas hoy o que mujer mas hermosa?

Rodrigo C.