domingo, 26 de julio de 2009

La hiel disfruta su café con azúcar




Antes de replicar a mi lector sobre mis aspiraciones, con 26 días de retrazo por andar de vagabundo y solucionando algunos problemas coyunturales que me salieron en el camino, quiero decir que con 4 entradas no seré un blogstar pero, si proyectándome a 3 años sigo teniendo 5 comentarios en mis últimas entradas tal vez me pondría a pensar seriamente si nunca seré blogstar, mientras tanto seguiré escribiendo hasta que el grupo decida separarse o expulsarme. Jajaja. (Sé que para algunos sonará patético pero para otros sonará diabólico)

También quiero platicarles que he estado de muy mal humor y teniendo episodios explosivos ya sea por comentarios, rupturas amorosas, etcétera, y regularmente trato de llegar a canalizar mis ideas aquí, escribiendo lo que pienso; ya se que podrían ser mensajes en botellas lanzadas al océano de la información, también algún día serán útiles, no en vano una empresa nos deja saturar sus servidores de información con la primer estupidez que nos sale de la mente y tecleamos todas las noches o los días (en mi caso a las 11pm), tal vez para el mal, tal vez para encontrar tratamientos costosos para psicóticos como yo y encausarnos al liberalismo, o tal vez sean comunistas los dueños de blogger.

En fin, en mi vida había visto "Recolectivo", tal vez mi error haya sido no conocer la existencia de ellos, hoy me siento una copia mala de algo que desconocía, el concepto es prácticamente el mismo, pero también no se si sea cinismo ya estar aquí y continuar justificándome en: saberme una copia de 50% Rubén (señor padre de Solaris), como me hago llamar es una vulgar copia del nombre de una película y un sistema operativo, pero hay tantos elementos que me hacen distinto y con personalidad, pero también cosas que me hacen tan igual a los amigos de "Recolectivo", que son tener el mismo lector crítico y sagaz, que es mi compañero Gibrán,

Leyendo los posts de la competencia, afortunadamente si tienen muchos lectores y en sus 2 últimas entradas sólo hay quejas de lo carentes de imaginación; cuando menos llevo 2 quejas, creo que voy bien.

Como aún siguen de vacaciones mis compañeros los únicos verdaderos e inigualables blogstars y no hay nadie que pueda censurarme por el momento, el tema de esta semana se va a llamar Solaris, dedicado especialmente para todos aquellos a los que no les agrado.

Pero recuerden: ustedes a mi si me agradan; no soy adorable pero tienen que soportarme, porque soy su vecino, compañero, cliente, familiar, compatriota y hasta compañero de lucha.

Ah, y regresando a la idea con la que comencé este post, aún no tiro mis cartas, en este juego aún no he perdido.

Nunca pensé ser tan soberbio, pero sólo hay dos formas de responder comentarios a mis post como estos, con indiferencia o con total atención.

Y saludos a Evil Charlie mi nuevo fan.

domingo, 21 de junio de 2009

El corazón del mundo





Bien, como todos se fueron de vacaciones, y yo me quedo en la ciudad de México, les quiero platicar lo que hice este fin de semana.

Este sábado, fuimos unos amigos y yo al centro de la ciudad a buscar unos libros para un pequeño proyecto sobre filosofía, esto me hizo recordar lo que me pasó hace una semana, pues por error un jovencito inglés de 20 años llamado Steven me agrego a su correo electrónico y comenzamos a platicar sobre nuestras vidas, él radica en Londres y estudia economía y yo le comentaba cosas de México, pero hubo algo que me sorprendió, Steven me aseguró que no conocía mucho de nuestro país, y de inmediato la pregunta que surgió entre nosotros 2 fue: ¿Por qué no se conoce mucho de México en Londres?, claro, lo primero que le respondí fue que era mala publicidad de nuestro país en habla inglesa.

Lo primero que le prometí era mejorar mi vocabulario en esa lengua, y cuando menos logré que escribiera “buenas noches”, aunque seguro no tiene ni la más remota idea de cómo se pronuncia.

Lo primero que me imagino de los ingleses, es gente de muy mal humor y con poco sentido del humor, pero me he dado cuenta, que no es así, son muy amables y corteses, esa es mi experiencia, y de su parte también recibí halagos sobre la forma en la que conversamos, fue esto como el reencuentro con el viejo continente pero en las mejores circunstancias.

He hablado con españoles, peruanos, chilenas, brasileños, neozelandesas y afortunadamente he tenido muy buenas referencias de esos países gracias a sus ciudadanos que les encanta experimentar el intercambio de diálogos que terminan en amistades a veces prolongadas a veces efímeras pero todas ellas muy padres, el problema en la mayoría de los casos es la lengua, tengo que aprender perfectamente la lengua franca del mundo contemporáneo.

Pero regresando a la idea principal, subo una foto donde me encuentro en el corazón del mundo para que el amigo Steven, me conozca y conozca el país que me vio nacer, jejeje y el país que me ha visto hacer mis travesuras.

Esa es la calle de Isabel la Católica, (coloquialmente conocida como “Chabela la Mocha”) y hay un restaurante, que no recuerdo su nombre, pero sirven comida muy rica y muy económica ($40MX), podrán reconocerlo porque hay un tipo muy insistente en que subamos cuando observamos el menú.

Y pues la propuesta ahí esta, hagamos mejor publicidad para nuestro país, y también para las personas de otras lenguas.

sábado, 13 de junio de 2009

Pero ella prefería escuchar mentiras piadosas...







"Yo le quería decir la verdad

por amarga que fuera,
contarle que el universo era más
ancho que sus caderas,
le dibujaba un mundo real
no uno color de rosa,
pero ella prefería escuchar mentiras
piadosas"

- Joaquín Sabina

Definitivamente las relaciones personales son un ejemplo claro de la utilidad de las mentiras piadosas. Son esas pequeñas frases que, ya después de un tiempo, ni nos damos cuenta que decimos, que se vuelven lugares comunes, todo con tal de no lastimar a aquellos a los que queremos.

Es una forma, un poco macabra, de quitarnos de problemas y de entablar relaciones, técnicamente, sanas (definitivamente las relaciones donde sólo se dicen verdades tienden a acabar mal). Precisamente el chiste de las mentiras piadosas es que su objetivo no es dañar a nadie, sino tratar de que no se entre en una situación no deseada por decir la verdad completa.

No sé, siguiendo la línea sabinesca, creo que en el fondo a muchos les gusta (creo que me consideraría entre ellos) dibujarse un mundo color de rosa, porque si viviéramos la realidad en su totalidad, si cada paso y cada palabra fuera un madrazo, y tuviéramos que desayunar, comer y cenar verdades que no queremos escuchar, no lo soportaríamos y... en una de esas, el índice de suicidios aumentaría :)

Definitivamente las mentiras piadosas, entendido que -para mí - son ese salvavidas trastornado de nuestra dinámica, son la leche del café de todos los días.

viernes, 12 de junio de 2009

Mentiras- verdaderas




Como ya les había dicho, para entrar en sociedad a veces se dicen mentiras, en muchos casos piadosas, como por ejemplo: “wow me gusta tu chamarra que compraste en Zara”; cuando dentro de ti dices: la tela más corriente de importación que barbaridad.

A mi me gustan más las verdades aunque parezcan ofensivas, me agrada más la gente que lo hace, aunque cuando esas verdades se repiten todo el tiempo llegan a fastidiarte y vuelves a pensar en que bonito sería que te mintieran.

Y bueno extendiendo más sobre estos asuntos, mi amigo Cesar, me dijo que hablara sobre la cigüeña y hablaré sobre la cigüeña.

Niños si me leen, no existe la cigüeña que trae a los bebés, los bebés se crean a partir de la relación sexual entre un hombre y una mujer, les platicaré mi anécdota.

A mis 11 añitos no tenia ni idea de que eran las relaciones sexuales y a los 13 tuve mi primera erección, involuntaria claro y estaba muy asustado, no sabia a quién contarle, no fue hasta que entré en la secundaria que me explicaron que eso era normal en la clase de orientación, y que no era un fenómeno como Hulk y tenia profesoras que me contaban que su primera relación sexual fue un jugueteo interesante ya que ellas no sabían que era eso (claro no contaban detalles éramos de secundaria) y parecían jugar a las correteadas cuando recién casados, porque ellas también tenían miedo. Eso me hacia sentir menos idiota jejejeje.

Esas no son mentiras piadosas.

martes, 9 de junio de 2009

No te conozco, miénteme, es tu última oportunidad

He de aceptar que no me eduqué apreciando la verdad tal y como ella se lo merece, la veía como parte de la dualidad más no como lo más importante de ésta; a pesar de ello, nunca significó para mí lo mismo decir la verdad y decir una mentira (osea, afortunadamente no me volví mitómana). La verdad solía implicar temor, la mentira sudor de manos y un tanto de cansancio mental.
Ahora, después de mucho tiempo y malas experiencias, comprendo la importancia de ser sincera a pesar de que por cortesía matice las verdades que, de no serlo, podrían resultar hirientes. En pocas palabras no soy del todo directa y suelo reservarme las cosas más molestas en el fondo de mi enojo. En fin, considero que la mentiras piadosas no tienen razón de ser, que es genial saber que las verdades absolutas no existen, que cada uno de nosotros tiene la suya y por más exótica que sea merece respeto, tal hecho me hace amar a la ciencia, esa cosa que nos ancla a la realidad,a esas verdades en las que se coincide involuntariamente gracias a la experiencia.
Mentirle a los demás tiene su chiste (es interesante evadir las situaciones que puedan evidenciarnos o invocar al recuerdo preciso) y aunque sea malo es menos idiota que mentirse a sí mismo aunque ello cause felicidad en ciertas circunstancias. Hablando de cosas estúpidas, creo que los detectores de mentiras son una de ellas (no pretendo ponerme en contra de los avances en ciencias biológicas y la distinción entre las reacciones que son muy similares) pero creo que hacer uso de ello es algo tan certero y tendencioso como aventar un par de dados con el propósito de que el resultado de las caras superiores sume doce.
Y a continuación la cita complicada (yo la describiría como un de complejidad dual) pero adecuada:
"Si por el camino de la mentira podemos llegar a la autenticidad, un exceso de sinceridad puede conducirnos a formas más refinadas de la mentira."
Octavio Paz.

lunes, 8 de junio de 2009

Más vale una mentira...

El “amor” parece ser la mentira piadosa por excelencia a lo largo de la historia, contada de boca en boca, de poeta en poeta, de ideólogo a idealista, y es que, nos han mentido, peor aún, nos hemos mentido a lo largo de los siglos. Dentro de nuestra existencia, a veces sin sentido, nos gusta pensar que la historia de Romeo y Julieta es la nuestra, y esa idea de “Dios es amor” es verdad. Nos hemos repetido mil veces “es que yo lo amo” y más del 50% de esos “es que yo lo amo” termina en divorcios y niños traumados.

Nos creamos la idea de una vida después de la muerte, para que a la hora de la hora no caigamos en pánico por dejar nuestro anillo de oro, regalado de la abuela, caiga en un Monte de Piedad empeñado por nuestra ahora nieta, porque eso pasa. ¿Qué será de mí y de todo lo que me pertenece? “Ah! pues es que no lo necesitas porque llegarás a un lugar mejor! parecido a El Rollo! Hasta tus lentes oscuros tendrás que usar con tanto Sol!” Básicamente tus ojos estarán quemaditos o dos metros bajo tierra.

“Tus padres te quieren tal y como eres”… y se empeñan día a día que te parezcas más a ellos. “La familia no existe porque así nos hayan enseñado, en verdad es amor familia”… y si no te pago los estudios la vecina del #512 inventará una mentira diciendo que yo soy el padre más malo del mundo. “Yo te apoyo pase lo que pase”… pero si quieres tener a ese escuincle, te me casas. “Eres bien inteligente hija”…así que para demostrármelo continúa con tu promedio de 13.

Y pa’ rematar, hay un Dios justo! que todo lo ve y que todo lo castiga, el cual, básicamente no existe cuando nos salimos con la nuestra, pero si se trata del carterista que nos robó la cartera en el metro, o el que nos robó la chamarra en la fiesta, o el novio que se metió con otra, huuuyyyy! que si no existe! hasta lo imaginamos con cara de malo y un gran rayo en la mano que le caerá a la persona que nos hizo daño.

Ahhhh!! pero a poco no las seguimos creyendo??

Mitomanía

En tu vida se han hacinado eventos de ultramar. Secretos íntimos y palabras jamás dichas existen en tu corazón dentro de un pequeño agujero negro. Se guarda uno a uno, jamás extraíbles. Pequeñas mentirillas y con ellas un miedo acompañándolas. Pequeños miedos vivos escalan de tu corazón a tu mente y bailan con tus ideas. Generan más mentirillas en tu vida. Acción basada en mentiras previas; previendo próximas mentiras.

Algunos lo llamarían mitomanía. Las mentiras se han vuelto la realidad paralela tan cierta para los demás. Es tu maquillaje de todos los días, de todas horas. “El metro se ha atrasado”. Mentir es tu herramienta para no explicar; para salir, sin ser percibido, del mundo común. Vivir en la doble moral. Mantener el estatuto social que ellos imponen y vivir a tu manera de una manera dual.

Tomas un papelillo y escribes una mentira. Das un saludo y mientes. Lo guardas con toda la consciencia. Escapas a los ojos de los demás. Excepto a un par.

Hay un par cuya mirada penetra dentro de aquél agujerito en tu corazón y conoce la verdad. Te ve desnudo y sin mentiras. Un par al cual no le puedes mentir. La pregunta correcta y la verdad sale a relucir, desdorada de todo albur. Sabe de tu inutilidad para mentir y desconfía.

Es una mirada cómplice con quién mienten al mundo y se burlan de él.

domingo, 7 de junio de 2009

Tema libre: ¿?




Cuarto para las doce, el reloj marca lentamente minuto tras minuto y segundo tras segundo. La situación en la que el lugar se encuentra, en realidad, no es nada deprimente...la luz del sol entra apoyando sus rayos sobre su cara y las palmeras, que se marean con el soplar del viento, se mecen y al verlas adormecen su ser. Es interesante en verdad la paz que lo embarga todo y que de pronto, es sustituida por las voces tanto exteriores como interiores que se escuchan alrededor.

Al salir del estado somnoliento y de embriaguez en la que se encuentra su cuerpo con una noche de sueño sin sueños, comienza a entretejer el aparato en el cual su día ha de transucurrir. Las expectativas son altas, las posibilidades remotas. Cuentos que no lo son, historias que se vuelven realidad...compendio de señales. Ahora camina, un paso se acompaña del otro, y los pies simplemente platican entre ellos la cantidad de lugares visitados y por visitar...

Hay que contemplar el horizonte, se dice, y con él encontrar el camino que ha de llevar a la felicidad. La infelicidad siempre rondante.

La noche llega.

Giros, giros y más giros. Whisky, whisky... un adiós. Clic, clic, clic...

sábado, 6 de junio de 2009

Tema libre: Soñando en metáforas







“Has visto
verdaderamente has visto
la nieve los astros los pasos afelpados de la brisa
Has tocado
de verdad has tocado
el plato el pan la cara de esa mujer que tanto amas
Has vivido
como un golpe en la frente
el instante el jadeo la caída la fuga
Has sabido
con cada poro de la piel sabido
que tus ojos tus manos tu sexo tu blando corazón
había que tirarlos
había que llorarlos
había que inventarlos otra vez.”

- Julio Cortázar


(Este grandioso poema me lo leyó una vez un gran amigo cuando le hablé en la madrugada para decirle que había tenido un sueño verdaderamente depresivo y sentía un vacío inmundo en mi interior.)

Rara vez sueño, normalmente me acuesto, encuentro esa posición perfecta de la almohada que me hace caer como tronco y no enterarme de nada hasta el siguiente día. Pero cuando sueño, sueño de verdad, huelo, escucho, veo y son cosas tan reales que, de repente, me pueden hacer llorar al siguiente día o haber deseado que el sueño no terminara.

Los sueños son ese pequeño espacio en donde somos nosotros mismos, en todo su esplendor. No tememos que pasen las cosas que escondemos, encontramos nuestros miedos, nuestras angustias y los sentimientos que negamos día con día por intentar no ser vulnerables ante la realidad. Es cuando bajamos la guardia, nos quitamos nuestras máscaras cotidianas y llegamos a conocernos tan sólo un poquito más.

De repente sueño que bailo como en tiempos pasados, o que nada más me dejo guiar por la música, de repente sólo escucho la misma canción – sin imágenes ni nada – que me remonta a mi infancia. Otras veces sueño que me estoy sublevando y de repente pierdo todo el apoyo. Sueño con que sonríes, sueño con que lloro hasta inundar el espacio de mis sueños, sueño con un futuro ya muy lejano para mí. De repente nada más siento una mano que toca mi mano y que me hace sentir en casa.

Por ahora, nada más espero despertarme y darme cuenta de que aún no te has esfumado.

viernes, 5 de junio de 2009

Cuando el amor esta por encima de todo




Ya hacia bastante tiempo que no me salían una lágrimas ni para humectar mis ojos tan rojos pero el martes de esta semana me encontré la radio una canción que me agradó mucho de Kelly Rowland una chica de 27.

Puedes escuchar una canción que haga estallar tus sentimientos y reaccionar de esa forma (en llanto) y no cansarte de escucharla; no se a ustedes cuales les haya llegado a causar nostalgia o algún tipo de emoción que no sabes si es tristeza o alegría a la vez, pero te quedas sin poder controlarte (aclaro no es bipolaridad).

Algunas veces te hacen recordar momentos importantes de tu vida y en otras algo que desearías con fuerza que sucediera, pero que sabes que no llegará.

Los dejo, con esta canción para aquellos y aquellas chicas que no podremos negarnos cuando el amor llegue a nuestras vidas, para comenzar a disfrutarlo pero también a sufrirlo.

...When love takes over yeaah
You know you can’t deny
When love takes over yeaah
‘Cause something’s here tonight...





Bueno también les aviso que utilizaré como medios alternativos al Hi5 este Blogspace entre otros.

martes, 2 de junio de 2009

Tema libre: Lejos de alguna clínica

Hace tres días que nadie deja un texto por acá- He de admitir que en varios renglones de lo escrito la semana pasada se notaba la prisa y esa sequedad mental que provoca el desvelo aliviado por la coca y la aspirina durante un fin de semestre; pero en fin, esta semana la empieza yo en martes (y espero que no se cabe hoy).

Los sueños son esa realidad alternativa donde los rinocerontes sin cuerno habitan contentos, los desconocidos se encuentran y platican lo que hicieron juntos, donde los abuelos tienen 15 (años) y son nuestros compañeros de viaje, los humanos vuelan, los dientes flotan en profundas piscinas, los autos arrollan (a 150 km/hr) sin matar a nadie, donde se vuelve al pasado sin una máquina del tiempo y los amantes se reencuentran con deseo acumulado, bajo el techo de estrellas y con nadie al rededor.
Alguno sueños son más reales que otros, en los primeros no recordamos que lo último que hicimos fue acostarnos después de cepillarnos los dientes y sentimos angustia cuando deseamos salvar a nuestra mascota del envenenamiento de un extraño, lo peor de todo es que por más esfuerzo que hagamos no lo logramos y nadie sabe por qué; en los segundos podemos hallarnos pecando con algún desconocido sabiendo que recibiremos alguna clase de penitencia, pero en el fondo sobrevive la idea en nosotros de que lo que estamos viviendo está fuera de la realidad, esto le da un plus a nuestro descanso, e incluso podemos correr con suerte, pues posterior a que sea dictada la penitencia nosotros despertemos a causa de una alarma.
De procesos biológicos complejos relacionados con el sueño se poco, pero lo que tengo claro es que descansar, es decir, llenarnos de energía aunque sea durante cuatro horas, es genial; lo pésimo es cuando dormimos por periodos largos y el desgaste del día anterior sigue presente, pero esta vez es peor porque el cuerpo adolece al mismo tiempo que los riñones y el rostro se hinchan. Conozco a personas que logran dormir por más de 12 horas sin problema: son los bebés y los niños; lo demás es huevonada o en su defecto enfermedad.
Los sueños son la mezcla precisa entre fantasía de primer nivel, deseos, miedos y la falsa reproducción de hechos cotidianos, en otras palabras son: el lugar donde habita la locura en transparente, con presencia de murmullo y forma de viento detenido.

lunes, 1 de junio de 2009

Tema Libre: Darme cuenta

Hay un momento de la vida donde me quise dar cuenta de muchas cosas; el andar solitario por el mundo y bajo la lluvia –sobre todo bajo la lluvia- es un placer deleitoso. Quise darme cuenta de estados anímicos contrarios son igual de ricos a sus momentos. La melancolía de extrañarle es equiparable a la sensación de tenerle cerca. Me quise dar cuenta de la naturaleza de las sombras y la luz; las plantas y los animales –sobre todo las aves. Descubrí un afán por la canela y su dulce-amargo sabor.

¿Dónde quedé con tanta realización? En el limbo. En el mundo hay un punto donde todo converge. En ese punto es fácil encontrarme. Es un lugar geométrico de la espiritualidad, donde todo existe y es tan amplio e imposible de abarcar. Veo reflejos de todo y nada a la vez. Todo se traslapa. Escucho música mientras el mundo gira alrededor mío sin pena ni gloria; el mundo simplemente gira alrededor de ese punto convergente.

En el mismísimo pilar del mundo, me quise dar cuenta de mi ignorancia y precario –aunque acomodado- estado. Me doy cuenta de mi gusto por el sufrimiento y mi gusto por el regocijo. El egoísmo y el altruismo no son opuestos, sino herramientas en distintas situaciones. Todo depende de nuestros fines.

Me quise dar cuenta de mi estado de retracción en ficciones y fantasía; pirarme a lugares lejanos a la realidad. En la realidad he encontrado caminos cerrados o confusos mientras en la fantasía el camino no existe. Me quise dar cuenta del verdadero poder de la palabra en su buen uso. Me di cuenta de mi poca habilidad para hacerlo.

Pero el mejor de mis descubrimientos es la canela y el sabor que le agrega a todos las bebidas que preparo. Descubrirlo al preparar cada vez una bebida. Descubrir, como si fuera nuevo cada vez, su dulce amargo sabor.

sábado, 30 de mayo de 2009

¿Y la suerte dónde está?



- Buenas... disculpe usted, ¿con la Señora Fortuna por favor?

- ¿Perdón?, ¿qué me decía?... es que no le estaba prestando atención.

- Este...si, no se preocupe. Nada más preguntaba por la Señora Fortuna.

- Ahhh, bien bien...pues no joven, se la debo ahora sí. Usted verá, es que yo soy nueva por aquí y aún no conozco a todos, pero la Señora que usted dice, la tal Señora Fortuna, no se ha parado por aquí.

-Mmm, ¿está segura? Es que he estado esperándola por un buen tiempo, pero nada más no se aparece. Me dijeron que podía venir a buscarla aquí, y que hasta te daban citas... y usted verá...yo necesito una.

- No joven, yo no sé nada de eso. Igual y le dieron mal la dirección.

- (En un susurro) Pues en eso estamos igual, yo tampoco sé nada de eso.

- ¿Perdón?

- Nada, nada... que igual y si me dieron mal la dirección. Gracias.
_______________ _______________ ______________

Suerte, fortuna, estrella. Causa, efecto, concurrencia de hechos. Destino, determinación y fatalidad. ¿Acaso milagro o providencia? He de decirlo, soy hombre de poca fe, pero eso no quiere decir que no crea en nada. Creo en lo que hago y en lo que dejo de hacer, y en la dinámica que eso crea mi alrededor. También creo que el único destino que se figura en el camino de nuestra vida es el que nosotros mismos transitamos y vamos creando al mismo tiempo.

A pesar de lo anterior, algunas veces se presentan situaciones que te hacen sentir tocado por el dedo de Dios, aunque uno diga que no cree en él y demás. Por tanto he de aceptar que sí, efectivamente he llegado a pensar en la idea de un ser omnipotente que ve en el mundo y en las personas que en el habitamos figurillas de un tablero, cuyas vidas giran alrededor del tiro de los dados que el mismo ser omnipotente hace.

Al final del día, me explico a mi mismo que esas cosas que algunos tildan de suerte y otros acaso de milagros, no son más que las circunstancias que giran no alrededor de unos dados tirados por un "algo más grande que yo", sino alrededor de la relación causa-efecto, acto-potencia, concatenación de escenarios posibles, imposibles y reales…

Es verdad, la idea de la suerte es tan encantadora.

... la hija muy loca de una madre muy sabia








No puedo decir que he gozado de buena suerte de mi vida. La suerte es, evidentemente, algo que uno no controla. Nada más llega sin avisar. A mí me ha llegado algunas veces.

La realidad es que, a pesar del enunciado anterior, soy de lo más supersticiosa. Siempre ha sido una costumbre familiar, desde pequeña crecí con una bola de creencias de que si hacías X o no hacías Y, las cosas pasaban, eran de buena o mala suerte. La realidad es que uno termina por predeterminarse y, definitivamente, las cosas pasarán. Hasta la fecha no puedo pasar por debajo de una escalera, no puedo abrir un paraguas bajo un techo, no puedo ver un gato negro sin sospechar, la sal ni a madrazos se pasa de mano en mano y, claro - ¿por qué no? - siempre que me doy un golpe en el codo no lo sobaré porque es de buena suerte.

Me niego, absolutamente, a definir cada aspecto de mi vida para ver si tengo buena suerte o no, prefiero - por ahora, tiempo presente - decir que lo trabajé, sea para bien o para mal.

No sé... tal vez es cuestión de suerte.

El día de hoy leí una parte del "Tratado Sobre la Tolerancia" de François Marie Arouet (osea... Voltaire). Quedé completamente enamorada de sus ideas, tal vez no del hombre, y me permito enteramente a citarlo.

La superstition est à la religion ce que l’astrologie est à l’astronomie, la fille très folle d’une mère très sage.

(La superstición es a la religión lo que la astrología es a la astronomía, la hija muy loca de una madre muy sabia)


P.D. Lamento mucho mucho mucho el post terrible de hoy, ando un poco nublada.

PINCHE SUERTE!!!!!!



Hoy tres veces me agarro un representante de la justicia tomando y me sacó dinero a mí y a mis amigos, mi madre me corrió de casa por enésima vez, el hombre que amo no está conmigo (y seguramente está con otra), no tengo dinero, ni donde vivir, tengo tres mejores amigos que me apoyan pero no me pueden ayudar en nada, tengo un padre lejano que comulga con los pensamientos machistas y mi madre que es desde que su primer amor la dejó, feminista, no me puede ni ver.
Mi hermana es gay y no se interesa en lo absoluto por mi vida. No tengo nada ni a nadie… será cierta la sentencia de mi madre de que siempre estamos solas? No lo sé… en este momento y acabada de ser desterrada de mi hogar que no es mi hogar por qué no siento que nada sea mío, me pregunto qué es lo que me hace ser yo. Problemas de identidad a los 20, no lo puedo creer!!!!!

No sé a donde iré., no sé lo que la suerte me depare, o el destino quizás, o Dios, o esas fuerzas supremas que mueven al universo sin que lo notemos… yo nunca he tenido buena suerte, tampoco mala, sólo no he tenido suerte… ni con el amor, ni con el juego, ni con la vida…, perdónenme, son las 5: 26 de la mañana y estoy muy alterada…

He arruinado todo en mi vida y no debido al destino o a la suerte a quien solía dejarle toda la carga de mis amargas desavenencias. Hoy entiendo, tardíamente, la suerte no existe, tú creas tu propio destino... y yo no lo estoy haciendo bien, por cierto!

Tu futuro es consecuencia directa de lo cultivado… los milagros son falacias, la suerte, la suerte no existe. Yo, ferviente admiradora de ella lo sé y lo he aprendido hoy 30 de mayo de 2009. La suerte es una falacia que hipnotiza, que juguetea, que hace creer en las sorpresas del azar, pero no.

La suerte es una mentira preseleccionada, es una tolvanera de voluntad que te hace pensar que tienes el control de tu vida. La vida es una ilusión de la que no nos atrevemos a despertar… el destino, es la vida disfrazada de azar para hacernos víctimas del ¨libre albedrío ¨.

¡Afortunada en el juego, desafortunada en el amor!

¿Qué tal desafortunada en todo? Pero con buena ortografía y eso si… buen sentido del humor. Qué más me queda??

viernes, 29 de mayo de 2009

La suerte de la fea a la bonita no le importa...

Me siento una persona alejada de la influencia de la suerte, no creo en la predestinación, por lo tanto pienso que todo lo que hacemos o dejamos de hacer tiene sus consecuencias.

Cuando tenemos el control de la mayoría de las situaciones, ignoramos que podrán ser cuestión de suerte, porque conocemos los sucesos inmediatos como respuesta a nuestras acciones, y sin estos no dan como resultado lo que esperamos, acusamos de inmediato a la mala suerte.

Eso me ha pasado en las semanas anteriores cuando pensaba que tenia el control sobre mi tiempo, todos mis planes, en especial el de salir al cine se han cancelado.

Pero si es cuestión de suerte, en el amor, he tenido los pésimos resultados, porque este es como un carrusel; cuando decidimos montarnos en él no podemos alcanzar a la persona de enfrente y la de atrás tampoco puede alcanzarnos, y así todos nos vamos siguiendo, pareciera que lo único que nos queda es observar, mironearnos, sin atrevernos a dar el siguiente paso, vaticinando que ese siguiente paso, podría hacer que se baje del juego.

Suerte, si cuando el amor toque a mi puerta yo esté dispuesto a abrirla, jajaja, porque siempre esta afuera el cartero con multas, y la vecina pidiendo la renta, pero me pregunto, ¿por qué no tocan pidiendo azúcar? Yo invito el café.

El lugar menos indicado para probar suerte es un canta bar, (chicas, cuando busquen que un galán les haga caso, jamás hablen de su ex novio, o terminaremos aburridos de escuchar lo bonito que fue su relación, y no será más).

A veces pienso que no tengo buena suerte, porque seguramente la tengo en frente y no la distingo por ser inherente a mi espíritu de aventura.

All these accidents,
That happen,
Follow the dot,
Coincidence,
Makes sense,
Only with you,
You don't have to speak,
I feel.

Emotional landscapes,
They puzzle me,
Then the riddle gets solved,
And you push me up to this

State of emergency,
How beautiful to be,
State of emergency,
Is where I want to be.

All that no-one sees,
You see,
What's inside of me,
Every nerve that hurts,
You heal,
Deep inside of me, oo-oohh,
You don't have to speak,
I feel.

Emotional landscapes,
They puzzle me - confuse,
Then the riddle gets solved,
And you push me up to this

State of emergency,
How beautiful to be,
State of emergency,
Is where I want to be.

State of emergency,
How beautiful to be,

Emotional landscapes,
They puzzle me,
Then the riddle gets solved,
And you push me up to this

State of emergency,
How beautiful to be,
State of emergency,
Is where I want to be.

State of emergency,
How beautiful to be,
State of emergency,
State of, state of,
How beautiful,
Emergency,
Is where I want to be.

State of emergency,
How beautiful to be,
State of emergency,
Is where I want to be.

State of emergency,
How beautiful to be.

jueves, 28 de mayo de 2009

Aun si no...

En verdad, una bendición es, y no una blasfemia, el que yo enseñe: "Sobre todas las cosas está el cielo Azar, el cielo Inocencia, el cielo Casualidad y el cielo Arrogancia"... Oh cielo por encima de mí, ¡tú puro!, ¡elevado!, Ésta es para mí tu pureza, ¡que no existe ninguna eterna araña y ninguna eterna telaraña de la razón:-
-que tú eres para mí una pista de baile para azares divinos, que tú eres para mí una mesa de dioses para dados y jugadores divinos!-
Friedrich Nietzsche, "Antes de la salida del sol", Así habló Zaratustra
Si alguna vez jugué a los dados con los dioses sobre la divina mesa de la tierra, de tal manera que la tierra tembló y se resquebrajó, y arrojó resoplando ríos de fuego:-
pues una mesa de dioses es la tierra, que tiembla con nuevas palabras creadoras y con divinas tiradas de dados:-
Oh, ¿cómo no iba yo a anhelar la eternidad y el nupcial anillo de los anillos, -el anillo del retorno?
Nunca encontré todavía la mujer de quien quisiera tener hijos, a no ser esta mujer a quien yo amo: ¡pues yo te amo, oh eternidad!
¡Pues yo te amo, oh eternidad!
Friedrich Nietzsche, "Los siete sellos", Así habló Zaratustra


Si es verdad que todo lo decisivo surge "a pesar de", lo esencial para llegar a ser tu propio destino es negar al azar. Los mediocres y los débiles siempre le siguen el juego a la seductora determinación, -ella les dice: "nada de esto es tu culpa", "salta y muere en este precipicio, pues el no tener alas no es tu culpa", "en la profundidad de aquel oscuro mar sumérgete, piérdete, ahógate, pues no eres un ser marino, no eres un tiburón ni una ballena; nada de ello es tu culpa"- en el fondo su fuerza es la negación de tu voluntad; en el fondo, su fuerza es tu negación de una voluntad.
Y lo decisivo es una decisión, pero también algo que decide [Y si es que decide, ¿entonces determina también?, ¿qué determina?... ¿A quién?]. Y la negación del azar no es la matanza del tirador de dados, sino el soborno espiritual para que los mismos salgan cargados.
Quien se acompaña de la suerte es un cobarde. El no decirse sí a uno mismo, el no aceptar el dolor de uno mismo, el no crearse uno mismo, el no robarle alas al cielo para volar uno mismo: el eterno decir no te tira, te golpea en el suelo, te arrastra, obtiene lágrimas de tu "mirar al suelo". Y la tierra se avergüenza de tí, y se avergüenza de tu cobardía, de tu haber dejado el destino de las cosas al tótem Suerte, ese Dios falso tan colorido, tan fácil de ser seguido. Ese Dios tan inútil.
Hasta el momento parece que determinación y suerte son lo mismo. Son lo mismo, pero sólo en sus consecuencias para sus idólatras. Naturalmente el sentido de determinación es mucho más pesado que el sentido de la suerte -en esta última aún queda alguna "esperanza", pero sólo para los espíritus mediocres. Juguetear con el azar puede ser de lo más divertido para el cuerpo, pero sólo cuando uno está decidido a reafirmar el primer sí del juego; entonces este tótem se despedaza y surge la posibilidad de sobornar al tirador de los dados, aunque sea para sufrir.
Entonces podrás decir: "Se me ha terminado la felicidad, ¡pero aún puedo dar mi sufrimiento!". ¡Ese es un decir sí!, aun si te encuentras respirando el frío aire de las heladas montañas.

miércoles, 27 de mayo de 2009

Mi suerte aunque a veces sea buena siempre resulta mala y no es que me deje llevar por el dramatismo, cosa usual en mi caso, es común para mí y para los que me conocen terminar involucrado en situaciones con finales inverosímiles, en circunstancias sospechosas y con probabilidades de suceder realmente escasas; no me quejo, los momentos de angustia y frustración presentados en esa curiosa envoltura resultan siempre mas llevaderos pues, cuando uno se pone a recapitular, descubre que la suerte no tuvo nada que ver... exacto... puramente contradictorio.

Me encanta culpar a ese concepto macabro llamado suerte pero, siendo sincero, muchas veces me pasa lo que me pasa no por el conocido complot que los dioses tienen en mi contra si no por una serie de irresponsabilidades, malas decisiones, distracciones o descuidos monumentales que hacen que todo salga mal. Eso, unido a la asociación con personajes de características similares, inevitablemente termina en anécdota.

De mi mala suerte, en resumen, me hago totalmente responsable.

De la buena suerte no tengo quejas, cuando llega es bien recibida y agradecida con bailes ridículos. No acostumbro mutilar conejos, ni conservar yerbas, las luces citadinas y el smog mantienen mis peticiones a las estrellas en un dramático cero, los gatos los prefiero negros y a los santos como decoración kitsch; la suerte me suele llegar coincidentemente cuando hago todo por encontrarla, cuando dejo de rezar y me pongo a buscarla con acciones, no con sueños.

Pero queda ese 0.1% de las veces en las que ni el trabajo ni las tonterías definen las cosas; esos momentos que no tienen razón de ser, que simplemente suceden, que hacen que todo lo bueno pueda ser malo y viceversa, es entonces cuando uno simplemente agradece su buena suerte o eleva una maldición al cielo.

La suerte, como el orgasmo, es de quien la trabaja; cuando juega a tu favor resulta casi igual de satisfactoria y cuando no... ni con M force.

martes, 26 de mayo de 2009

Más o menos

Antes pensaba que la suerte no existía, que todo dependía de la mano de Dios ¿qué fácil, no? Al razonar así me evitaba cuestionamientos, comparaciones y tal vez depresiones respecto a la que considero -ahora- mi poca (buena) suerte. Es tan poca que a veces no se nota o tal vez prefiero no pensar en ella. Y sinceramente no creo que sea algo malo, sólo creo que es poco afortunado y ya, ocasionalmente me consuelo la idea de que hay gente menos suertuda que yo.
Lo genial es que esa suerte que a mi me falta a otros le sobra, otros más la tienen equilibrada y así, eso resulta por demás interesante. y digno de observación, regocijo o envidias.
Y es que lejos de tener la oportunidad de ir a la Universidad o de las habilidades en puntualidad que cualquier persona tenga, sé pues que la suerte va más allá, está en esas cosas que se hallan muy lejos de nuestro control, por ejemplo: los aguaceros estilo diluvio a la mitad del camino y te hacen decir "No parecía que fuera a llover, hacía taaanto sol"; la ocasión que vas estrenando una prenda nueva y al caminar pisas un charco y te salpicas de algo más turbio que la lluvia acumulada; la vez en que el auto (que se encontraba en las mismas condiciones que otros cuatro) es víctima de la grúa hiperactiva que justo cinco minutos antes de que llegara su dueño se lo lleva; o cuando se va el agua el día en que más prisa tenías y habías pasado la noche sudando sin razón, por lo tanto era necesario una ducha urgente, y finalmente: arribas tarde por hacer malabares con el garrafón de Electropura y tu tambo de agua ahorrada, además de hacerlo en condiciones de limpieza media. Como ejemplos de esos hay varios, lo mejor de todo es que a largo plazo y en calidad de recuerdos suelen dar risa y en el fondo despiertan el deseo de que nunca vuelvan a suceder.
Lo indiscutible, como ya mencioné, es que hay personas con más suerte que otras, hay quienes no tienen y hay otras a las que les sobra (aunque no sean del todo inteligentes y ni siquiera noten su suerte), pero en fin. Así es la suerte.

lunes, 25 de mayo de 2009

De la suerte y sus efectos

Es de mala suerte ser supersticioso.

Mucha gente me ha dignificado diciéndome poseedor de gran suerte. No me gusta hacerles caso incluso en aquellas ocasiones cuando podrían tener razón. Es cierto, no he tenido mayores contratiempos -descartando aquellos causados a mano propia. Frecuentemente encuentro dinero en la calle. Mis variados amigos suelen ser deleitables incluso si los encuentros no son tan frecuentes. Me he salvado en variadas ocasiones de desafortunados accidentes y en algunas ocasiones de la mismísima muerte.

La suerte lo acontecido en nuestras vidas sobre lo cual no tenemos control. Es suerte encontrarnos con gente, suerte encontrarse sin gente. El calificativo de buena o mala es tan subjetivo como la pregunta del vaso medio lleno o medio vacío. Por esto mismo me parece injusto clasificar nuestras desgracias como mala suerte cuando fueron desgracias forjadas a mano propia. No es mala suerte haber chocado el día de tu presentación. Es circunstancia donde uno no supo manejar adecuadamente por salir tarde y querer llegar a tiempo. Es más injusto decir tener buena suerte después de haber incitado por algún medio que nos sucediera algo favorable.

Sin embargo, la suerte está presente. Habrá que aprender a vivir con ella y hacer de ella una bonita historia. Esa es la mejor función de la suerte: traernos circunstancias para después poder armar una bonita historia. Sin la suerte, aquellos momentos tan memorables jamás habrían sido. Tuvimos la suerte de vivirlos y saber tomarlos con buena cara.

Mujer de poca fe

"Si en el restaurante estuviera el carnicero local en lugar de Tomás, Teresa no se hubiera dado cuenta de que en el radio sonaba Beethoven "....


Siempre he pensado en la suerte; en ella como creación del hombre, como ese cachito de fe que nos queda para continuar jugando. A veces la detesto, afirmo que no existe y cada quién hace con su destino un comino; otras, me agarro a ella con las uñas hasta de los pies, al final, siempre me llevan a la misma cosa: a ese sentimiento de superioridad o de un toque dado por alguna fuerza ajena a mí, gracias a la cual siempre me va bien, y cuando no es así, rara vez caigo en el pozo debido a eso, me gusta negarlo antes de decir “que pinche suerte” o “así tenían que ser las cosas”, incluso llegando a aceptar un poco de culpa “sino hubiera hecho eso…” en cosas que no tengo nada que ver. Soy mujer de poca fe, pero con un chingo de suerte.

Si conozco a alguien con buena suerte, es a mí. Justo el viernes afirmaba algo así -el karma todavía no me cobra todas las que le debo-. Puedo caminar plácidamente a las dos de la madrugada sin que me asalten; no prepararme para un examen y ese día, no me lo harán por causas superiores a mí; conseguir comida gratis, alcohol gratis y trips gratis. Mi mala suerte se reduce al metro retrasado siempre que tengo prisa y otras cosillas. Las decisiones fuertes, las resuelvo con un volado.

Me gusta pensar que a ti y a mí nos unió algo más fuerte que nosotros mismos y la suerte; me gusta creer fue ese primer abrazo, como cuando buscas y por fin has encontrado; algo que se mide por la cantidad de besos de tu nuca a la punta de tus pies; se siente por la cantidad de veces que tus brazos han recorrido mi cadera; por los gritos y las carcajadas, entre lágrimas, entre vino. Vale poco todo, si tengo tus manos en mi espalda y mi boca en tu cuello. Es estar de 12 a 8 junto a ti, tenerte a ratos, aunque sea prestado. La suerte, tal vez, radica en que yo te deseé tanto como tú a mí.

domingo, 24 de mayo de 2009

Jugando con Sortis...

Sortis es una pequeña traviesa y juguetona, tan alegre que sus sonrisas causan eco, usa calcetillas que disimulan la malicia con que en momentos actúa, los holanes de sus prendas le dan el aire de inocencia fortuita, Sortis cuando corre llega por mera casualidad, de forma favorable o adversa, siempre ocurre o sucede que Sortis se te aparece…


Sortis corre y corre, choca contigo y ¿Qué sucede? ¿Qué te pide a cambio?, la respuesta es muy simple, Sortis te pide comida… y ¿Cuál es la comida favorita de Sortis…? Sortis se alimenta de sonrisas, de dichos favorables, de saltos contentos, de agradecimientos azarosos… Me han contado que si encuentras a Sortis, dichoso debes dar un brinco en señal de agradecimiento… si no le haces ese rito, Sortis se enfada y toma represalias… tarda en aparecer.

Sortis es una vaga… deambula por las calles, si encuentra una sonrisa que le agradé se toma de ella y le obsequia un don… don que debe detectarse en los primeros diez segundos de poseerlo, por qué si no, el efecto se extingue… y jamás vuelve, es por ello que debemos andar con los sentidos bien despiertos… te doy un consejo – Busca que nunca se te escape Sortis -

Sortis, Sortis, Sortis… ¡¡juguetona!! A las escondidillas le gusta jugar… si se te esconde tú la debes buscar, no te quedes esperando su llegada, sal y busca, sal y esmérate, sal y sedúcela, sal y conquístala…por que ella a veces se hace del rogar… en ocasiones la envidia de Sortis me espanta.

sábado, 23 de mayo de 2009

A los amigos...




Ciertamente, la amistad es una de las relaciones más entrañables y complejas que el ser humano es capaz de desarrollar. Una línea delgada separa la frontera entre el “ahh sí, somos compañeros” o el “claro, es conocido mío”, y el poder decir “él es mi amigo/ella es mi amiga y a mucha honra”… una línea delgada pero difícil de traspasar, y por lo mismo difícil de mantener.

A lo largo de mis diferentes etapas educativas, cosa que no sé si les pase a todos, he ido cambiando de amistades y manteniendo algunas otras. Hay muchas personas a las que recuerdo con cariño y que he podido llamar amigos en algún momento de mi vida.

Imágenes del kínder con niños aventándose piedras en una pelea férrea por ver cuál de los dos grupos lograba ganar el derecho a los juegos del patio, y después la inevitable regañada y el lloriqueo tras la cual al hacernos los inocentes lográbamos librarla y hasta obtener un chayote hervido (delicia del Club de Leones provista por la maestra Mari Tere) como recompensa a un yo no sé qué.

Después estaba la primaria con mis inseparables Queta, Lucero, Esteban, Viridiana y momentos de diversión al lado del auditorio contando lo que para nosotros eran historias aterradoras de fantasmas, la siempre mojada visita a casa de Estaban, las largas tardes en casa de los abuelos de Queta y las escapadas de casa para ir al cine o a patinar. También mi inseparable amigo Anuar con el cual las luchas por el control de las naciones con el juego de Estratego eran de todos los fines de semana bajo la mirada atenta de su abuelo, que no podía más que aconsejar a uno u otro sobre cuales piezas había de mover o que era hora de ir mejor a agarrar el Súper Nintendo antes de que el juego acabará con “sangre de por medio”. También Moisés y Aníbal, tardes y más tardes de diversión tan sólo a unas cuadras de mi casa, adictos a los videojuegos por días y noches enteras. Roberto, el primazo postizo con el que las platicas, venturas y desventuras nunca faltaron.

La secundaria….la mesa del centro con Miguel, Alan, Oscar y Toño. Tardes enteras en mi casa semanalmente, aprovechando la ausencia de padres y la entera disposición de los privilegios que una casa vacía le puede brindar a niños de secundaria. Con Miguel los interminables planes maquiavélicos, con Alan las horas y horas interminables de risa y disgustos, con Oscar la finca del Sumidero y la búsqueda de jicamas. Tampoco puedo olvidar al Jarocho, a Sergio, Jair, Melo, Rossana, Erika, Amayrani, muchos de ellos me acompañarían en la siguiente etapa…

Prepa, ahí afiancé amigos y perdí a otros….muchos ahora tan sólo son compañeros, muchos empezaron como compañeros y terminaron como amigos sin los cuales no podría hoy día concebir mi vida. Miguel y Alan, siempre han estado y espero sigan….problemas, alejamientos, pero ahí estamos al fin y al cabo. Carmen con todo y refrigerador encima… Amayrani, los buenos momentos y las platicas de confidencias que creo nos ayudaron tanto sin que al fin hiciéramos lo que tanto platicábamos… Sergio, el compañero de guitarra y bicicleta, maestro de futbol, uno de mis hermanos…. Abraham, carnalazo de mi alma que abrió mi mundo a los placeres de Soda y también el mejor confidente por mucho tiempo…. Ralo, Ale, Omar y Vhs está en la casa…. Carlos, Gustavo y Ruth whisky, barajas y antro… Jair y Chama, compañeros de pedas del ayer y del hoy, apoyos incondicionales aunque a Jair le de hueva…

Puedo decir que soy afortunado de haber tenido presente en mi vida a aquellos a los que acabo de hacer mención… a algunos los he dejado de ver, con otros el contacto mínimo… hay quienes siguen muy presentes y es algo que espero siga así.

Hoy por hoy… la universidad me ha abierto un mundo de nuevas personalidades, y hay quienes a este punto ya son amigos entrañables dentro de lo que ahora es mi segundo hogar (incluido departamento y Facultad)… para ellos (que saben quiénes son) las más sinceras gracias pues como dice uno de ellos “son los inseparables de la facultad sin los cuáles la carrera no sería tan grata”. Sinceramente, yo no sé si soy el mejor amigo, pero hay que decir que los quiero, los respeto y no los cambiaría por nadie.

PD. Perdonen el largo del post pero ahora si me debrayé.

Yo tuve un(a) mejor amigo(a) cuando...







Siempre he envidiado a aquéllos que tienen la fortuna de decir “Te presento a Fulano, es mi mejor amigo desde Kinder II”. Aquéllos que pueden llevar una relación de amistad, con todos los altibajos que puede tener una relación no romántica, que pueden jactarse de haber visto crecer y cambiar a su amigo en cuestión – o a sus amigos, personas que envidio aún más – y que hasta la universidad se siguen frecuentando.

En mi caso, yo llevo ya varios años huyendo de las reuniones de mi primaria, secundaria y prepa, esas fiestas en donde todo mundo se dedica a ventilar todas las pendejadas que hiciste, en mi caso a cuanta gente aliené ya que desde el último año de la primaria me costó mucho trabajo mantener amistades cercanas y tomé la decisión que me marcó de por vida de preferir la soledad. Odio reencontrar a aquellos a quiénes hice daño, me hicieron daño o, peor aún, que sé que en cualquier momento pueden insertar un comentario como “jajaja, es como Ana cuando...”.

Es cierto, todas mis mejores amistades pasadas han terminado en catástrofe, siempre terminan con un drama, una pelea a muerte o un simple silencio glacial. Tuve una mejor amiga desde Kinder I hasta como 2º de primaria, ahora estudia Comunicaciones en la Anáhuac y es, ahora, una persona completamente desconocida para mí y que sólo una vez intentamos platicar ya en la prepa y nada más no nos caímos. Mi otra mejor amiga de 3º y 4º de primaria es baterista y tengo el mínimo contacto por Facebook con ella, pero nos caemos bien y ya, la otra mejor amiga que tuve en ese período fue la hermana de mi primo, una mujer manipuladora como ella sola y que ahora no puedo ver ni en pintura.

Antes de entrar a la H. FCPyS tenía yo la súper tendencia de volar de grupito en grupito buscando una forma de identificarme y encontrar gente con la que compartiera ciertos intereses... Extrañamente mis escuelas siempre fueron de esas que son típicamente sectarias, en donde ya te clasificaban de entrada dependiendo de la gente con la que te llevabas, una especie de comedor de las películas gringas. Tuve un par de mejores amigas intermitentes de la secundaria y la prepa; el “tuve” refiere a que una de estas amistades terminó con un silencio frío frío frío porque cambiamos mucho, la segunda por traición de su parte, traición que todavía me duele recordar. Guardo algunas amistades de la prepa, la mejor de todas vive en Monterrey y nos vemos cada vez que viene y la amo, mi mejor amigo es un hippie de primer nivel al cual adoro, el otro adoradísimo estudia Periodismo en el Tec y nos vemos poco pero siempre que nos vemos lo abrazo mucho porque lo extraño y lo quiero y así...

Creo que, dentro de todo, mi momento de oro en términos amistosos ha sido la universidad. Una de mis mejores amigas es la primera mejor amiga que tengo que es menor que yo, que la adoro y la amo y sé que siempre estamos allí la una para la otra, sea para echar desmadre, platicar, profundizar, llorar, etc.; por otro lado, mi compadre de la Fac es una de las mejores personas que he conocido en la vida, podemos platicar por horas de todos los temas, convivir todos los días, sentarnos al lado y aún así decirnos “te extraño”. La verdad es que este nuevo período de la vida me abrió los ojos y me dio el chance de conocer a muchas personas que valen mucho la pena, lamentablemente no se pueden mencionar todos porque entonces me sentiría mal de haber dejado fuera a alguna de esas personas que me han ayudado a ser quién soy y a tener momentos inolvidables. No es una entrega de un premio, jamás lo será, son puras remembranzas.

(Me doy toda la libertad de hacer un post largo porque esta semana no hubo mucho quorum, si no lo quieren leer, no importa, me sirvió para reflexionar)

viernes, 22 de mayo de 2009

Amici e Benedetti

Las relaciones humanas tienden a evolucionar con el tiempo y gracias a la afinidad en amistades, y todos nosotros podemos constatar que gracias a ciertas actividades y tiempos algunas de estas amistades terminan en verdaderas hermandades, amigos que se vuelven confidentes, que están verdaderamente en las buenas y en las malas con nosotros y que hacen todo por apoyarnos cuando lo merecemos y no dudan en regañarnos y reorientarnos cuando es necesario. Podemos ver a nuestros verdaderos amigos a nuestro lado en los peores momentos, justo cuando no vemos el final del túnel y nos sentimos solos, ellos son los que ponen su mano en nuestro hombro y nos impulsan a seguir.
Me siento afortunado al conocer este sentimiento y tener amigos entrañables que a pesar de la distancia son grandes compañeros de viaje, de alegrías y de tristezas.

Dejare este tema por el momento para expresar mi profunda tristeza por la muerte del maestro Benedetti, no puedo decir que soy un fanático en la extensión total de la palabra, pero si puedo decir que mi interés por la poesía se debe en gran parte a las obras del uruguayo, descubrirlo fue un placer y adentrarme en sus versos siempre es un deleite. Debo de reconocer que si algo envidio a los grandes escritores es su inmortalidad, la carne podrá ya no estar, pero con el simple hecho de ser leídos, su espíritu sobrevive.

No te salves
Mario Benedetti

No te quedes inmóvil al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora ni nunca. No te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo sólo un rincón tranquilo
no dejes caer lo párpados pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo.

Pero si pese a todo no puedes evitarlo
y congelas el jubilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo

Los mejores amigos son los que tiran la primera pedrada.



¿Cómo poder decidir de entre todos tus amigos a los mejores?, podría recordar a mis friends de la secundaria, a quienes les prometí ser por siempre su amigo, aunque no los he visto en años y seguramente somos totalmente distintos, con personalidades contrapuestas.

Creo que hubo un inter entre la secundaria y la universidad muy largo en el que no encontré amistad.

Hoy me sería difícil decidirme entre tod@s ell@s, como el o la mejor, en realidad en todos tienen algo distinto, con lo que, en determinado momento de mi vida me puedo sentir a gusto; por ejemplo: cuando me siento con ganas de echar desmán, voy con mis cuates de 2do semestre y nos subimos en los vagones del metro a echarnos palomasos, aunque cuando ya estén en su juicio me exijan bajar los videos de you tube con la amenaza de cobrarme regalías (me conocen tan bien que saben que mi punto débil es el codo y no el talón de Aquiles).

Cuando me siento triste o nos sentimos tristes, nos erigimos de facto, aunque sin el más mínimo conocimiento de psicoanálisis (no cuenta haber leído a Freud) como los sicólogos de los sociólogos, dando y recibiendo consejos a diestra y siniestra, algunos consejos son buenos, otros nos animan, hasta llegamos a encarnar a Patch Adams para levantar el autoestima de las personas que más queremos.

Yo no creo en la amistad de personas que se ofrecen a solaparte tus acciones incorrectas, ellos son las personas que siempre quieren aprovecharse de ti. Si creo en cambio, en la amistad de los que siempre te critican, los que siempre te molestan dándote lecciones y bajándote lo engreído, demostrando que hacen las cosas mejor que tu.

martes, 19 de mayo de 2009

Pocos nombres.

Antes de empezar agradezco hayan dejado espacio para mi entrada, noto que sus textos en borrador. ¿Fue protesta? ¿O el fin de semestre?

María se ha caracterizado casi siempre por traer una sonrisa colgada del rostro, un par de anteojos descansando sobre su nariz y por hablarle siempre a todos quienes la rodean, a todos los del grupo. Ella puede enunciar sus tres mejores amistades en tres nombres femeninos, saben que lo han sido por dos razones tiempo -sobre todo- e intensidad. Lucero jugaba con ella en sus primeros años sociales, iban en el mismo plantel de preescolar, se conocieron por un ride para llegar a prisa a la escuela. Sentían que las horas de juego se agotaban más rápido que el vaso con agua de limón que saciaba su sed por agotamiento al final de la jornada lúdica. De sus pequeños amiguitos fue Lucero a quien más extrañó al ella cambiar de residencia. En el nuevo lugar María andaba al principio resentida, seguía con la misma sonrisa (esta vez adornada con cubitos y líneas de metal) y le hablaba a todas la niñas y nuevos vecinos; tuvo varias mejores amigas temporales a las que recuerda muy bien, pero sólo de María Gabriel*, la última que hizo antes de volver a la su lugar de origen, fue de quien conservó la amistad, el detalle es que esa chica ahora vive en Cd. Juárez y María cree que tendrán que pasar muchos más de los casi tres años que lleva sin verla para que vuelvan a compartir un café con galletas de Calufe, cocinar juntas de nuevo un pastel o hacer una pijamada hasta que salga el sol (aunque pierda vigencia pues con más de 20 años de edad puede que no resulte tan entretenida).
De vuelta en la gran ciudad María redescubrió a su amiga Paola, con quien había tratado en los años preprimarios, pero esta vez fue distinto, compartieron esa etapa extraña llamada adolescencia. Juntas se convirtieron en observadoras de los cuerpos celestes nocturnos de ese recorte de cielo que se forma de entre las siluetas de los techos pertenecientes a los edificios donde viven, practicaron la caminata (casi de manera profesional) al darle numerosas vueltas al parque, pocas veces fueron jugadoras de basquet y muchas más la porra del equipo de soccer. Sólo una vez asistieron al cine y un par de noches bailaron; en la primera de ellas María descubrió que ella ha sido su mejor pareja de baile, en la segunda el efecto de la mezcla de coca [cola] con café. Ahora Paola es más que su confidente aunque se vean para comer una vez al año habiendo entre sus casas no más de 100 metros de distancia.
Ellas sólo cuatro ciclos escolares fueron en la misma escuela -mas no en el mismo grupo-, el resto no. Tienen en común la piel morena y el pelo negro, van a las mejores universidades(una en privada, otra en pública), un hermano cada una y en mascotas de la misma raza.
Claudia fue la amiga de María en el bachillerato, en común tenían pocas cosas y pasaron momentos por demás divertidos y variados. Su amistad inició más por motivos académicos que otra cosa, María piensa que su relación es algo extraña, pero constante y cree duradera, y por lo mismo muy importante.
Anexo.
Ofrezco una mención especial para la admirable Avith, un recuerdo para Luz Minerva y Thalía a quien deseo que le esté yendo bien, para Xóchitl a pesar de que nuestra amistad le importó una práctica de laboratorio, para la peculiar Ximena aunque nunca me hable en mi cumpleaños y a la entrañable Zuri quien está ahí en momentos estratégicos.
*La cuarta importante.

domingo, 17 de mayo de 2009

Yo no soy mucho de recordar…

No de en balde soy la niña friolera... pese a que se diría que tengo un carácter un tanto excéntrico, ¿¿amigos?? Pocos…

A lo largo de la historia, cuento con un registro de compas, no más, siempre me he rodeado de mucha gente, pero es justo ahora, con este tema, reflexiono un poco más y por las condiciones actuales de mi vida, prefiero la soledad o a esos que son los consagrados….por ser tema central, les contaré de mis consagrados…

Mi primer amor, hasta hoy continua siendo un gran amigo, nos separan muchos kilómetros, pero que geniales son esos encuentros fugaces que nos permitimos cuando la distancia se hace tan pequeña, ese es mi consagrado.

¿Mujeres? Algo extraño y un tanto irrelevante en mi vida. Enamorada de una, sí, pero no sólo es una simple y vil mujer, es más que eso, es mi amiga, mi amante, mi confidente, mi complemento…vivo y viviré enamorada de ella, tiene esa nariz perfecta que siempre he querido tener a mi lado; es mi consagradísima, es tan inteligente y sutil, que me sorprende, la sorpresas que me brinda la hacen ser más que una simple mujer… te amo.

Por otro lado, una mezcla extravagante de niño- niña… unos chinos ya no tan espesos, pero aún enroscados y coquetones… con él me inicié en el mundo de los arrimones… (yo era el activo) es un pesado jotito…al cual amo y al cual le debo el haber concluido y aprobado ciertas materias en la ENP, pero, pensándolo bien, yo le hacia sus ensayos de ética… me place la retroalimentación que he tenido con este chaparrito jarioso…

Desde mi ingreso a la universidad, el hallazgo de personas extraordinarias no ha cesado, pero sí se ha vuelto más complejo, las diversas tareas me han impedido abrirme … no por ello no he descubierto a personas extraordinarias, entre ellos, a una niñita, de nombre común en la idiosincrasia mexicana, la quiero, es tan simple y no por ello insípida, es tan sabia, que se ha convertido en mi mentora… el cafecito de los martes y jueves lo espero realmente con ganas, el ir a los cuadros de pasto y ver las nubes, te quiero mucho… probablemente una más de las pocas damitas que me dejan pasmada.

Un chaparrito metalero con complejo de psicoanalista… te amo, tan oscuro como el chapopote y perverso como el mismo Satán, tierno y amable… uno más de los consagradísimos, pese a que lo dejo plantado, siempre sigue ahí, es tan jocoso como su playera morada… que bueno es salir al cine con él, aunque después me reproche el haberme quedado dormida ( él siempre paga)…


ahhhh… que feliz estoy. Justo en estos momentos, cuando comencé a escribir no contaba con muchas expectativas, mis consagrados son pocos, pero tiene una gran talla, y no por ser obesos precisamente …. A los que me detuve a describir es por que lo creí pertinente…

Gracias a mi hermana pude encontrar a un gran amigo, un médico arrogante y narizón, pero al cual le he tomado mucho, mucho amor, es mi hermanito postizo… En la universidad, otros duendecillos se unen a esta lista, duendes preocupados por aprender y aprehender todo lo que puedan… chivis, paquito, dany., diego el jarocho, memito de san cristo… necesario colocar sus nombres… son de Derecho y no les gusta especular si son o no son a los que me refiero…

El último consagrado del que hablaré, es ese maldito que me hace llorar cada que aparece sin avisar… el niño del cerro, mi Caín, consagradisisisisimo, esos viajes de un día, esos encerronas, esas platicas, esos planes… ya no es ni podrá ser lo mismo, pero aún así, es un consagrado, con el cual de vez en cuando saldré a comer nieve, me pelearé por los colores, y todo ello por que es un consagrado más.

Chale, y al final creo que este tema removió muchas cosas…consagrados, los quiero, ustedes saben quienes son… la Friolera no los olvida, aunque soy inexpresiva.

Smelt like teen spirit

Yo tenía 10 cuando lo conocí, él 20 y se parecía a Alejandro Sanz cuando cantaba Pisando Fuerte y todavía no se tenía que pintar el cabello. Tenía los dientes parejitos y ojos café claro. Era metalero y rockero. Fue el que me introdujo al mundo del grunge y me metió a la cabeza a Nirvana,Soundgarden y Pearl Jam.
Cuando lo conocí me daba miedo. Yo era fresa, salía con mis amigas a la calle para andar en bici y comprar helados. Escuchaba Five y todas las boybands. Él, a sus 20 no había día que no se vistiera de negro, trajera los audífonos puestos y fumara. Con todo eso, recuerdo que sus dientes eran blancos y usaba unas botas negras tipo militar. Le empecé a hablar porque se juntaba con nosotros; porque hacíamos chistes tontos en las noches y porque en poco tiempo se convirtió en el mejor amigo de mi hermano. Los sábados y domingos se quedaba a comer en mi casa mientras jugaban Grand theft auto y reían como locos. Poco a poco me fui interesando en esos juegos tontos, eran tan estúpidamente incorrectos.
Después me hice su mejor amiga; era poco razonable que una niña de 12 años le resolviera sus conflictos amorosos tipo “ella dice que está embarazada! pero yo no le creo” y Gloria, cuando tenía un poco de razón decía “yo nunca tendré novio”. Él sería mi primer novio a los 13.
A él lo recuerdo como la mayor influencia que tuve de sexto de primaria hasta cuarto de prepa; cuando me hice mis puntas rojas y me vestía como hippie. Con el aprendí la mítica frase de "todos tienen algo bueno, menos Stephanie"; él logro hacerme creer, y a veces lo creo, que todas las personas tienen algo positivo, incluso aquéllas más nefastas.

La última vez, recuerdo hablar con él afuera de mi casa, yo iba en cuarto de prepa, ya sin puntas rojas y dejando de ser tímida; él, sólo fue a mi casa por el play station. Me confesó andar viviendo con alguien, cuando el tenía 25 años, y ella como otros tres. Querían tener hijos pero no podían, y que, tal vez, sólo tal vez, su cuestión amorosa se estaba yendo a la ruina. Después de esa plática con él no volví a saber de él. Ella no lo dejaba ir al retorno pensando que ahí estaba su amante. Seguro ahora tiene 29 años, tres hijos y una panza, que por sí sola ha de pesar lo mismo cuando tenía 25 años.