jueves, 14 de mayo de 2009

La verdad y luego...

Seis años en el deporte son suficientes para tener muchas experiencias acumuladas en eso de las confesiones entre copas, que ojalá fueran de vino, la realidad es que la mayoría de las veces es en chela, whisky o lo que encuentres (consultar opciones en el post de Glo). Lo cierto es que siempre he querido sacarle la verdad a alguien cuando su estado ya no es del todo conveniente sin embargo siempre me resulta al revés.

Frases como: Yo no debería estar diciéndote esto pero te cuento que… o Desde el primer momento en que te vi me enamoré perdidamente pero no me atrevía… o Bueno, ya que estamos siendo sinceros si lo besé, pero te juro que no significó nada… la verdad es que si me gustas… yo si me lo daba… y otras indiscreciones del estilo se me vienen a la cabeza.

El hecho es que con un chupe en una mano y un cigarro en otra, ya medio tambaleante, cuando aun eres simpático o comienzas a mal copear, las verdades surgen tan fluida y naturalmente que es hasta el día siguiente cuando las consecuencias inevitables te llegan y no te queda más que justificarte diciendo:
-Neta yo dije eso?- No, pues no me acuerdo; nooo, cómo crees? eso no es cierto, sólo lo dije porque andaba borracha!- Tal vez deberíamos reconsiderar eso de ser novios- y demás justificaciones a tu larga lengua de la noche anterior.


Pero borracho no siempre se dice la verdad. Después de unos tragos cuando tus amigos te preguntan – Wey, estás bien?- respondes – Si wey, no hay pedo-, a continuación te encuentras abrazando en el mejor de los casos el retrete o la maceta más próxima y mostrándole a tu público lo que desayunaste ese día, lo cual evidencia la falsedad de tus declaraciones previas.

La desinhibición causada por el alcohol te lleva a lugares insospechados, la mayoría de las veces, no muy convenientes para tu imagen pública. Tengo una amiga que estando sobria es muy seria más al calor de las copas la ropa comienza a estorbarle tremendamente lo que trae como consecuencia que en cada peda ella termine despojándose de sus ropas enfrente de quien esté.

Mientras otras se tornan más intelectuales y comienzan a conversar con los grandes teóricos; recuerdo esa noche que inclinada en una tarja preguntaba insistente – ¿Tú qué piensas de la vida Adorno?- (refiriéndome a Theodor Adorno, teórico de la escuela de Frankfurt) quien nunca me respondió por obvias razones.

Así podría citar muchas experiencias en las que las palabras salen sin el permiso de tu voluntad, lo malo no es hablar de más, lo malo es terminar lastimando a las personas o arrastrar tu reputación por los suelos, eso ya no está bien, y lo he aprendido a la mala, así que todo tiene sus límites. Hubo una época en la que yo sobrepasé todo límite, sin embargo recapacité a tiempo y como un amigo dice: ahora ya no me ensucio y eso es ganancia!

Se dicen infinidad de estupideces, verdades, insensateces y mentiras cuando se está en alcohol pero, hay una cuestión insoslayable y que no se debe olvidar: nunca se puede dejar de decir ¡SALUD!
Una dedicatoria especial para mi amigo R. Victoria quien ya tampoco se ensucia!


6 comentarios:

Insane Steve dijo...

Ammm, como comenzar?:

Es deliciosa la lectura de tan bella dama como lo es ud señorita Katalina.

Sus experiencias la hacen ver en demacia interesante, es verdad.

jeje. amm pués bueno, confesaré, mis amigos me conocen como steve, me hago llamar serial killer;

y son una fan de la señorita Katalina, cada conversación con ella es mucho muy divertida y para no variar siempre te hace sentir especial.

He tomado clases en diversas ocasiones con ella y no cabe duda, es una mujer sumamente inteligente y con mucho estilo.

En pocas palabras y menos colocado; eres la mega banda karlita, y tus publicaciones son geniales, mucho muy interesantes y yeah, si me llega esa espontaneidad,como que te hacen imaginar los hechos y se disfruta mucho, eres genial, te ganaste un MÄS GRANDOTOTOTE. jejejejeje.

MeL dijo...

taaaaaaantos custionamientos,
robos, peleas, perdidas, golpes...

y mirate! estas enterita y fingiendo haberte curado..

yo deberia complementar tu post con una graaaaaan cantidad de anecdotas pero seria demasiado protagonismo de tu parte, hay que dejar espacio a los demás...

aun asi nunk olvidare tu conversacion con Adorno...

Salud!

por Mario!!!

jajaja

José Antonio dijo...

Esta lleno de lugares comunes y francas tonterías.

Karlota Katalina de fuego y nicotina dijo...

Gracias por tu comentario Jose Antonio, cada quien tiene su opinión y es válida.

Supongo que tu jamas has estado borracho y nunca te ha pasado nada de eso, tal vez por eso no lo entiendes.
Te invito unos drinks y verás que en tu peda terminas diciendome que me amas.

Solaris Sánchez dijo...

ajajjajaja José Antonio, pues de eso se trata de poner tonterias y lugares comunes, la gente es común a veces y especial a veces, aquí podemos ser lo que queramos, común o especial...

Es una forma por lo menos para mi persona de desconectarme un poco de la política y lo trasendental.

Y encontrar un momento de sonrisa o grato cuando leo lo que hacen las personas en lugares (comunes) a los que no todos vamos.

José dijo...

Nada más faltaba un wey q pensara que 1 lugar común es una ubicación geográfica